lunes, 23 de enero de 2012

Si?

Si no escribo no es por falta de ganas...
Si no me inspiro no es por falta de ánimos...
Si no duermo no es por falta de tiempo...
Si no rimo no es por falta de palabras...
No obstante si me faltan ganas, ánimos, tiempo y palabras para decir, contar o exprresar como me siento... Y esa expresión ausente es lo que me quita y aleja de escribir, inspirarme, dormir y rimar...
Algo halagador por ahí, algo poco elocuente por acá, algún pequeño sueño por allá y algún pequeño cuento de hadas rozando los limites de mi cordura, que para otros es locura, por aquí...

Si me das por muerto, lo siento, sigo luchando por lo que quiero... Si me das por ausente, que sepas que pronto volveré... Si me das por soñador, no te equivoques con otros soñadores, yo sueño de verdad... Si me das por gilipollas, enhorabuena, has acertado...

Y por qué no?
http://soziedadalkoholica.blogspot.com/2011/02/por-que-no.html

jueves, 12 de enero de 2012

Fragmento de El Temor de un Hombre Sabio

Sangre y tinta

En su Teofanía, Teccam habla de los secretos y los llama «tesoros dolorosos de la mente». Explica que lo que la mayoría de la gente considera secretos no lo son en realidad. Los misterios, por ejemplo, no son secretos. Tampoco lo son los hechos poco conocidos ni las verdades olvidadas. Un secreto, explica Teccam, es un conocimiento cierto activamente ocultado.
Los filósofos llevan siglos cuestionando su definición. Señalan los problemas lógicos, las lagunas, las excepciones. Pero en todo este tiempo ninguno ha conseguido presentar una definición mejor. Quizá eso nos aporte más información que todas las objeciones juntas.
En un capítulo posterior, menos conocido y menos discutido, Teccam expone que existen dos tipos de secretos. Hay secretos de la boca y secretos del corazón.
La mayoría de los secretos son secretos de la boca. Chismes compartidos y pequeños escándalos susurrados. Esos secretos ansían liberarse por el mundo. Un secreto de la boca es como una china metida en la bota. Al principio apenas la notas. Luego se vuelve molesta, y al final, insoportable. Los secretos de la boca crecen cuanto más los guardas, y se hinchan hasta presionar contra tus labios. Luchan para que los liberes.
Los secretos del corazón son diferentes. Son íntimos y dolorosos, y queremos, ante todo, escondérselos al mundo. No se hinchan ni presionan buscando una salida. Moran en el corazón, y cuanto más se los guarda, más pesados se vuelven.
Teccam sostiene que es mejor tener la boca llena de veneno que un secreto del corazón. Cualquier idiota sabe escupir el veneno, dice, pero nosotros guardamos esos tesoros dolorosos. Tragamos para contenerlos todos los días, obligándolos a permanecer en lo más profundo de nosotros. Allí se quedan, volviéndose cada vez más pesados, enconándose. Con el tiempo, no pueden evitar aplastar el corazón que los contiene.
Los filósofos modernos desprecian a Teccam, pero son buitres picoteando los huesos de un gigante. Cuestionad cuanto queráis: Teccam entendía la forma del mundo.

lunes, 9 de enero de 2012

Podría

Si te dijese que te quiero o si te dijese que te odio la piel que recubre el día a día para hacerlo ameno desaparecería para dar paso a algo que no sé si quiero conocer y aún menos sé si me gustará o no... Si te dijese que en mi corta vida he aprendido más de lo que todo el mundo cree, no me creerías pues al fin y al cabo soy solo eso, un chaval más, sin nada que destaque en él...
Si te dijese que tanto el dolor como el placer enseñan bien me contestarías con un ''ya lo sé''. Pero en el fondo no entenderías nada más allá de mis palabras... Si te hablase de sueños, de deseos, de aspiraciones, tendrías claro algo que, si no lo sabes ya seguro que lo sospechas, estoy loco... Si te hablase de mis pensamientos oscuros probablemente me pidieras que no volviese a hablar de ello... Si te hablase de las palabras en sí lo más seguro es que no entendieras como entiendo yo cada letra y cada sílaba... Si te hablase de mi razón verías que se centra en poco más que lo necesario y que lo demás lo dejo a voluntad de otras facultades... Pero si mintiese, si ocultase mi ser en gran parte, conocerías lo que conoces ahora, solo la clara superficie de un hondo lago que refleja el sol, pero no sus profundidades... Pero si te dijese que que solo sueño con ser feliz verías en mí una persona alegre y distraída del mundo...

El día que las palabras sean valoradas por todos como deben ser valoradas, el día que en las palabras se vea más que letras, se sientan en el corazón. Ese día podrá comprender mucha más gente que lo que escribo aquí siempre tiene un sentido en cada palabra más allá de lo que dicen las frases, tiene un sentimiento y un cuidado, un pensamiento y un universo de dudas detrás, un calor y una fuerza que escapa a la razón, esa razón que tanto critico...

Sé leer, sé escribir, sé hablar, pero lo más importante es saber saber...
Y si hoy me considero más sabio que otros, desde luego me considero más inepto que muchos más...

Definición de amor de Quevedo

Es hielo abrasador, es fuego helado,
es herida que duele y no se siente,
es un soñado bien, un mal presente,
es un breve descanso muy cansado.
Es un descuido que nos da cuidado,
un cobarde con nombre de valiente,
un andar solitario entre la gente,
un amar solamente ser amado.
Es una libertad encarcelada,
que dura hasta el postrero paroxismo;
enfermedad que crece si es curada.
Éste es el niño Amor, éste es su abismo.
¿Mirad cuál amistad tendrá con nada
el que en todo es contrario de sí mismo!